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Mostrando las entradas de enero, 2019

[Critica] Mar de amores (Öyle Bir Geçer Zaman Ki): las novelas clásicas no mueren (al menos no en Turquía)

Que son lentas*; que duran demasiado; que no se entiende el nombre de los personajes; los nombres de sus actores son impronunciables; etc, etc, etc. Todo esto y más se le puede achacar a los enlatados turcos, y no les falta razón. Pero también hay que decir, a su favor, que sus historias son románticamente insuperables. Así es, mientras en México o Colombia ya dejaron de hacer este tipo de historias. Y en Brasil han optado por serializarlas de una manera diferente (realismo mágico). En Turquía todavía creen en el amor clásico. Y una muestra más es Mar de amores. O sea, la novela lleva la palabra “amores” y nos dice que estamos en un “mar”. ¿se puede ser más específico? En cuanto a lo que se ve, estamos ante una historia lineal donde se pasa de punto “A” a punto “B” de una manera sencilla. En la novela no hay mayores descubrimientos. Por un lado el esposo (marino). Por el otro la esposa (madre y ama de casa) y la amante (telefonista). El leitmotiv es la infidelidad. Un tema

[Critica] Vivan los niños (2002): el lado más infantil de Televisa

Si hay algo que no se puede permitir en la televisión actual (2019) es la de subestimar la inteligencia del televidente, peor aún, si se trata del público infantil. Esto es lo que hizo Vivan los niños (2003), última versión mexicana del clásico infantil de los ochenta “Carrusel”, con una serie de malas decisiones por parte de la adaptación y llevándolo a limites tan o más estúpidos como el peor de los capítulos del chavo del ocho. El problema de Vivan los niños radica en su mal manejo de personajes y en que “los niños” de la historia son copias exactas de “sus padres”. Son adultos en miniatura. Y como tal, su mundo no es infantil sino el de adultos en un mundo de niños. Entonces las consecuencias se vuelven infantiloides y se trastocan pasándose a terrenos poco recomendables como el de confundir la travesura por la malcriadez. Forzando al televidente a reír con la gracia de tirarle un balde de pintura al profesor de turno. Lo peor es que capítulos más adelante veremos como

Notas rápidas #3: El regreso de Magaly y el fin de los ampays

"Ya no existen los "ampays". Los "ampays" murieron con Magaly. Ahora todos se ampayan solos en las redes sociales. " Con estas palabras Magaly Medina regresó el lunes 14 de enero a la tv nacional vía canal 9. Regresó a su casa. Como ella misma lo aclara. Y lo primero que hizo fue darle una chiquita a su antigua casa televisiva y a sus pericias en los espacios que le tocó conducir. Nada más al entrar (a lo que era el set de Combate) demostraba que es un producto vencido. Con poco o nada nuevo que ofrecer. Y da la impresión que cansada. Justo esto último es lo que más me sorprendió. Magaly se apagó al segundo de entrar en escena. No era esa Magaly chabacana, desenfrenada, que entraba bailando en su espacio. La Magaly que yo vi fue un remedo, una Magaly que tardó en ubicarse en su nuevo escenario (horrible, por cierto), que presentó un teléfono gigante como gran aporte de modernidad y que entorpecía el ritmo del programa cada vez que intentaba usarlo.

[Critica] Beyhadh, un amor sin límites: ¿una protagonista diferente?

La cuarta producción de la India se estrenó hoy con un capítulo de media hora y sin cortés comerciales. Beyhadh cuyo subtítulo es "un amor sin límites" tiene toda la parafernalia de estas producciones desde el arranque (casi era ver un carnaval). Además que marca el regreso de la protagonista de Saras y Kumud con un personaje, aparentemente, distinto. Justo este aspecto podría ser lo más interesante de la novela de seguir realmente esta premisa y de presentar una arista por primera vez vista en las producciones de la India (al menos de las que nos han llegado): una protagonista profesional y solvente. Y es que el arquetipo femenino de las novelas de la India se han repetido en muchachitas de provincia, soñadoras en espera de su príncipe y que el 99% de su tiempo piensan en su amor. Así es como, sin ser del todo malo y viéndolo como un denominador que también es predeterminado en su prolijo cine, las producciones indis beben en exceso de la inocencia del amor. Son tan

[Critica] Los Vílchez: 1000 oficios, Al fondo hay sitio, De vuelta al barrio, etc., etc., etc…

Todo el 2018 ha sido muestra de que la popularidad ya no se encuentra en la tv abierta sino en el streaming y más precisamente en Netflix. Muestra de esto es que nadie habla de la novela mexicana, de la brasileña o de la turca salvo ciertas excepciones. Pero aun así los verdaderos fenómenos del 2018 van desde la española La casa de papel, pasan por el biopic de Luis Miguel y terminan en La casa de las flores. Esta última serie debería ser el punto de discusión más serio de los grandes broadcasters de la televisión latinoamericana ya que al fin una novela tal cual, producida en una de las mecas del género, ha podido sintetizar y modernizarse en una serie de 10 capítulos y no perder el espíritu del género por más que esté al límite de la parodia. O quizás esto junto a la plataforma hayan sido la fórmula del éxito. Y es que Netflix es el presente y el futuro de la televisión. A donde quiero llegar con este punto es que en el Perú el ejemplo de conformismo se vio nada más al comenz

[Critica] El último bastión: la serie que no viste pero si votaste

En la mayoría de paises con canal estatal de sus pantallas sale la mejor programacion con las mejores ficciones y las mejores opciones de entretenimiento. Son los llamados, y obligados, a ofrecer la televisión de mejor calidad porque, supuestamente, tienen un rol distinto al comercial. Bueno pues, a diferencia de España o Inglaterra, o de casos cercanos como el de Chile o Argentina, la televisión estatal peruana o TV Perú hace lo que puede con contenido variado, cultural y blanco. Esto último más que nada. Y entre sus pocas opciónes el último mes ofreció una serie- novela histórica que terminó con seis capítulos su primera temporada y que fue lanzada en horario estelar como correspondía. A diferencia de Nuestra historia, El último bastión tenía algo más de promoción tanto en medios internos como externos. Pero al igual que la ficción anterior fue una mezcla ambigua de buenas intenciones y bajo nivel de producción. Así es, El último bastión es un producción modesta, con limitac

[Critica] De vuelta al barrio (2da temporada): Le faltó más Pedritos

Como dice la canción “ódiame pero no me olvides”. Bueno pues, a De vuelta al barrio, que acaba de terminar su segunda temporada, le falta más odio porque le es totalmente indiferente al público. Y no voy a caer en comparaciones porque las comparaciones son odiosas y para el caso una completa pérdida de tiempo. Ya queda claro que no tuvo, no tiene y no tendrá el éxito de Al fondo hay sitio (que américa emite en las tardes). ¿Pero que le falta a DVAB? Fácil, le faltan Pedritos. Si la primera temporada el personaje más simpático de ver fue La felicitas. Esta segunda, el verdadero protagonista ha sido Pedrito y su romance con Lily, hija del personaje que interpreta Melania Urbina (perdón si no recuerdo el nombre). Un romance que para la serie representa el amor inocente de la verdadera pareja protagónica que no se dio en el pasado y que ha calada mucho más en el público a través de las redes sociales. Entonces se entiende porque el final de temporada tuvo como clímax el bes

Notas rápidas #2: Ojitos hechiceros 2, Combate y ¿Dónde está mi hija?

Breve opinión sobre la actualidad televisiva La metaficcion en Ojitos Hechiceros 2 En una de las escenas donde Sabrina suelta intrigas sobre “Estrellita” el minuto a minuto era de 38 puntos. Mientras que el programa fue de 41 puntos. Ella y “Mondonguito” estallan de alegría. ¡¡¡¡Falso!!!!. La televisión de hoy en día a duras penas pasa los dos dígitos de audiencia. Incluso la segunda parte de esta historia hace un rating tibio con respecto a producciones anteriores en el mismo horario incluida la primera parte de hace algunos meses. Así es como Michelle Alexander confunde al público o, en su defecto, subestima la capacidad de información del televidente. La decadencia de los realitys de competencia El viernes 14 de diciembre debería ser una fecha importante para la televisión nacional. Combate, el pionero de los realitys de competencia, pondría fin a su ciclo en señal abierta. La explicación del fin se debe 90% por cuestiones de sintonía (como la mayoría de canc

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¿Qué pasó con Rostro de justicia? Panamericana Televisión cambia horarios y ya NO aparece la novela india en su programación

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